He tratado de tomar distancia, de hacer complicadas cuentas de días, kilómetros, horas, calles frías, laberintos, olvidos. Consulté mapas que confirman que el tuyo es otro mundo. Ha sido inútil. Esta mañana, por ejemplo, me he hecho el firme propósito de tomar distancia, anteponer un montón de razones para irme ya alejando y decir adiós sin palabras, que siempre es el adiós más difícil, el más artero. Pero apenas te he visto y he olvidado hasta la hora. Bastó que desde lo lejos intuyera una tormenta, para que botara propósitos y razones, para que el corazón y las ganas se desbocaran, y para que un cuello suspirado me robara todo el aliento. Yo lo que quiero es encontrarte para invitarte a perderte conmigo, Magdalena, que la piel le hable a la piel el deseo que callan las palabras y que el silencio habla… Espero entonces, tu silencio y tu palabra
Xingqiu X Ghongyun 💙🌊❄🏳🌈
Un día decidimos hacer una obra juntos. No sabíamos que, no sabíamos cómo, ni menos con que resultados. Asumo que solo sabíamos que juntos. Yo estaba mentalizado a que no importaba el desenlace sino la gigante estética de los sentimientos ahí fabricados y pulidos, en un devenir de texturas y colores proyectados y unificados a nuestra obra.
Al tiempo de enfocarnos en nuestra labor constante que tomaba ya una consistencia y una mesura radiante, gustosos por amor a crear cooperábamos. Al detenerme en diferentes momentos a observar el panorama quedé embelesado al saborear tan bello e inmenso potencial y al saber que tan radiante podía llegar a ser nuestra obra.
Dije: "Bien. Pues. ¡Hagamos algo con esto!" Y así quedó. Tomamos primeramente cincel y sobre una gigantesca roca de mármol negro comenzamos a trabajarla. Así, juntos. Los trazos iniciales eran suaves, delicados, largos y placenteros, matizados con ternura y una pizca ligera de timidez combinada con incertidumbre. Avanzando algo maravillados en la escultura del mármol bello llegamos a denotar mutuamente en un grado más profundo de intimidad. Nos percatamos de que no había problema, al contrario, teníamos una apertura bastante buena para crear, gigantesca. Así agarramos más confianza con nuestro amor como dínamo. Los trazos con el cincel comenzaban a ser más fluidos, dinámicos, fuertes, la ternura era más solida y tangible, la timidez ahora era una firme seguridad y el placer mutuo al trabajarlos crecía. Continuamos así, trabajando y mejorando. El groso mármol negro tomaba una figura tremenda, bellísima en sí y constituida muy sólidamente. No solo era la escultura en el mármol negro... ¡Éramos nosotros!
Tomando más profundidad planteamos impregnar de esta obra con colores del alma, así adquiría esta otra profundidad. Comenzamos pues a pintar sobre esto. Colores del alma. Unos hermosos violeta de mi ser, un tanto potentes, frontales, dulces, cálidos y elegantes, un poco de rosa de su ser un tanto inseguro, infante y tierno pero decidido. También un carmín salvaje de los dos y un tanto de amor amarillo de mi parte ya aprendida e impregnada.
La gestación de aquel embrión, esa obra, marchaba muy bien. Ambos trabajamos muy bien, gustosos y esmerados en cual perfecta obra. Perfecta como individual. Individual como irrepetible. Irrepetible tal cual como se presenta con cada persona. Así de maravilloso. Un tanto por ser nuestra y otro tanto porque no se repetiría jamás, por cuanta gente con la que lleguemos a trabajar. Cada quien una maravilla ¿cierto? Tan maravillosa como las demás que sabía que haría con demás parejas. Aunque en ese momento, juntos era lo que nos competía, importaba y amábamos. Ya a su tiempo trabajando con alguien más otra cosa sería, igual de maravilloso e irrepetible.
Me gustaba quedarme ahí. Estático y en confort de nuestro fulgor, tan placentero. Paladeando y oliendo tan suaves, dulces y deliciosas sensaciones, incluso escuchando aquella obra nuestra que tenía su propio espectro sonoro. Deleitando mi vista con el mármol tallado de nuestro esfuerzo y acciones y pintado de nuestros colores del alma. Un festín a los sentidos, una bocanada para el alma. Perfecto a su manera. Habíamos logrado redactar emociones y situaciones imposibles de proyectar juntos en esta obra.
Podíamos quedarnos ya por la eternidad contemplando todo esto. Los arreglos finales estaban postergados a cuando se nos placiera de mejor manera. Por lo pronto disfrutábamos de todo esto, era lo que debíamos hacer.
Al estar maravillados por la obra y la odisea de esta misma en un momento llegó el horror. Nos asustamos. No tenía caso postergar nada, no tenía si quiera sentido ponerle arreglos finales a esta.
Se canceló. No se terminó. Y esto hiso arder a la misma esencia de la escultura. Alimentado el fuego por rabia tibia. Era un ciclo al acariciar recurrentemente el desperfecto por el que no concluyó la obra. De ciclos acariciar caí en remolinos. Y trabajando arduamente con mis demonios, ahogándolos poco a poco, cuerpos de luz me envolvieron a renacer, fui del otro lado del espejo y así recaí en que esa obra era parte importante de mí. Esto era un hecho innegable y hasta absurdo y algo estúpido afirmar lo contrario.
Me levanté de mí y en fa me pare frente a la obra. Ya había quedado lista. No había nada que hacer, nada que quitar y nada que poner. Todo ya había sido trabajando en su respectivo orden y causa. ¡Que maravilla!
Quedó listo. Y lo inauguré como obra e institución de nosotros dos. Y la entregué a la vida como parte de mí. Un esencial pasaje.
Finalmente no importa que tanto ardiera el monumento que levantamos y pulimos ambos con tanto esmero. Importa toda la odisea y el proceso que llevó el llegar a su punto ápice y final de nuestra obra. Las brazas y las cenizas de esta constituyen nueva parte de ambos que nos deslindan a la alborada de cada uno, más sin embargo, esta obra la creamos ambos con todo lo que implicó y despertó el llevarla a cabo. Un detalle infinito que dura para siempre.
Robert Mustang.
Fue hace vidas distantes, que destilaba orgullo un día que me convertía mentor de una bella mujer que pienso, debió haber sido mas constante conmigo. No me importaba nada mas que mi estúpido ego y mi cuidado por enseñar no lo mejor, sino lo que era. En esos momentos no estaba focalizado a ningún otro pilar de mi vida mas que a la única compañera que aun no sabía, me acompañará de nuestra concepción hasta nuestra muerte, mi amante a la cual hay gente que le suele llamar Música.
Aunque fue la única ocasión que me permití transferir transparemente ese tesoro que tan ambiciosamente conservo, mantengo y administro ese no fue un impedimento para que esporadicamente antes de desgastarse una vuelta al sol se cruzaran palabras.
Llegó esa ocasión, de aquellas que solo pasan una vez, un destello, mientras yo flotaba ligeramante, adulante y distraído en mi cátedra , recuerdo haber sentido su luz por lo que entonces conocedor de ese brillo, acudí atónito a su encuentro. Recorrían impulsos eléctricos por mi cuerpo, desde mi alma que en ese momento inquieta, sentía un deseo inquebrantable de tomar contacto con su alma, fuera de toda prisión física y corpórea, solo alma con alma. Ella ya se había percatado de mi curiosidad, y estoy certero que un poco también de mi incertidumbre de ella. Acudí a saludarla agarrándome firmemente claro esta, los pantalones a lo cual coqueta y burlonamente me contestó de igual manera, con cierto aire tierno. Comenzamos a hablar porque me vio dando mi cátedra por lo que de ahí se derivaron más temas, fui muy idiota al creer que era normal, de ahí a la fecha lo he sido talvez , pues, ya casi finalizando, me enseño algo, me dejo perplejo porque solo así comprendí que era como yo, al menos.... en cierta forma, lo cual me dejo aterrado y fascinado. Se despidió y me quede pasmado, mi mente trabajaba a toda velocidad, vértigo, emoción, adrenalina, en conjunto para reconstruir su voz misteriosa, suave y cristalina, sus ojos de miel tan profundos y penetrantes que me miraban y acariciaban mi alma y su cabello castaño tan magnético y destellante que contrastaba con su tez morena y bella.
Con el tiempo fui conociendo día a día a una chica rebelde, inquieta, independiente, llena de energía y ternura que fue escalando nivel a nivel, ya sea por meras casualidades o causalidades impregnando su ser en mi alma. Poco a poco ganando mi afecto, mi cariño, mi transparencia, mi sinceridad y poquito de mi corazón.
Acepto años después que fui un idiota con ese error que cometí, de algún modo era de las únicas cosas que pude hacer, mas bien la última que quise llevar a cabo. No se como no me he podido acercar jamás a ti pues siempre tan fiera como cuando te conocí me tuerces planes y crees salirte con la tuya, tu manera tan pedante de etiquetarme de las cosas más ruines en la vida sin siquiera conocer lo mas vital de mi escencia, sin siquiera abrir la puerta para escuchar lo que he tenido guardado y creyendo siempre tan poco de mi, sin saber que no soy el mismo infante de hace cuatro años, que he sido moldeado por personas, vivencias y emociones, que te he tenido siempre presente.... aunque no sepas nunca he estado lejos, siempre he estado contigo de una u otra manera, a travéz de diferentes personas, en detalles y en momentos, angeles y hasta Dioses. Bien dice mi hexágono rosa que siempre parezco estar un paso adelante de mucha gente, y sí, me esmero siempre en anticiparme, cuidando detalles, claro tu siendo tan importante para mi jamás has estado exenta de esto.
Tu manera de ser tan, filosa, a la ofensiva, esquiva, furiosa y fugaz, siempre buscando proyectarte como la mujer mas fuerte, lo cual lo reconozco y admiro inmensamente, mas sin embargo, tambien conozco tu fragilidad, tus miedos mas profundos, los hechos que te formaron, tus prioridades, gustos, placeres y una gran parte de tu alma.
Espero al día en que según mi profeta, mi hermana gemela difunta y amada, frágil tengas esa dependencia al sol y pueda entonces concluirse esta historia, pero iniciar otra nueva, estoy gustoso en verdad de que me odies, pues de no ser así, no sentirías nada por mí y bien he descubierto que el proceso de amor a odio es lineal y reversible es un proceso bidireccional. No espero de ti amor, no espero de ti cariño, solo emprender juntos una sinfonía sin planes, espontánea y esporádica como las cosas más bellas de la vida. Incluso puedo sentir tu silueta bella junto a mí. Estoy tranquilo y te espero al final del camino, al inicio de otro donde este sol se vea ahogado por mi resplandor.
Con cariño: Freddie Sparks
Robert Mustang - Musa
Historia de un fin Estaba en mi cuarto lleno de rombos, entre la muerte y el nacimiento, divagando en el diván de los recuerdos, reviviendola a ella, con su risa y su serenidad, su temple tan obtuso, tan misterioso, tan rebelde. Cada Rombo del cuarto estaba constituido por cientos de recuerdos. Estaba ahí... en el Diván, sentado a merced de los rombos, a merced de los recuerdos y a merced de su sonrisa, sin entender que debía hacer, sin entender si debía poner fin a todo eso. Entonces lo comprendí, no podía seguir existiendo mas, no para ella, la había perdido y solo por permitir que mis miedos me domaran, quería apagar las estrellas y reiniciar el juego, aquella partida en la que había procurado defender al reyna sin mover mis peones. Cada peón fue desplazado según mis miedos a consumirse en la incertidumbre al no saber si estaba bien o fallaba con mis decisiones y fines. Lo cual vine comprendiendo demasiado tarde. Cerca del nuevo fin, me desprendí de mi ropa, mis emociones, mis miedos, mis ambiciones y aspiraciones, estaba ahí, en el mar, entregandome dulcemente al fuego que consumiría mi persona.... persona que no existiría mas. Comencé a caminar en dirección al fin, en mis ojos habían diluvios de determinación, sentía los impulsos eléctricos recorriendo mi cuerpo al momento que avanzaba a mi muerte bailando con ella. Noté que algo me jalaba, era su sonrisa que parecía retarme y a la vez provocarme, las olas del mar a su vez se burlaban de mi.... escuchaba su voz en ellas, recordé que todo comenzó en un aula olvidada, y "cuando no había mas que decirnos se abrían al aire vacíos que no podíamos respirar", estaba en el momento justo donde pensaba que me fallarían el animo, la determinación y la resolución. No importa que tan fuerte aprendiera a golpear, sabia por mi experiencia que nadie golpeara jamas como la misma vida... pensé que tenia que hacerlo, ya estaba a la mitad del camino, entonces avancé con mas fuerza, mas determinación, y pude notar que se desprendía algo de mi, era la ambigüedad, esto me impulsó, avanzaba y el mar me jalaba, casi como si supiera lo que quería, como si me implorara que lo dejara devorarme con una noble belleza y a la vez una inquietante fiereza, casi como un niño en un berrinche y fue entonces que deje que el mar me tomara. Esa noche devoro la persona que fui.
Habían pasado tres días desde que murió aquel hombre devorado por el mar, nadie lo recordaba ya. En su lugar estaba sentado otro hombre, un hombre forjado por los riesgos, que luchaba por lo que quería sin mas escrúpulos, un hombre entregado, desbordaba felicidad y plenitud, el hombre era el amor en persona, este hombre había nacido hace apenas tres días. Este hombre fue en quien renací Este hombre fue en quien me convertí Solo así podía amarla y lo hice por ella
©Robert Mustang
Todo ser tiene su razon de existir, ¿estaremos aqui por mera casualidad o con un mero fin? La existencia de un ser un humano no ha de ser vana mientras cumpla con un proposito, para eso hemos de estar aqui; para contribuir cada uno a su modo y su alcance a mejorar el universo. Al momento de la muerte simplemente hemos de transformarnos, quedan todas nuestras acciones y omisiones plasmadas en la vida, quiza habiendo tocado otras vidas, quiza habiendo cambiando algo que no debio estar asi, quiza moviendo fines o moviendo medios....quizas. "El proceso de la vida y muerte no es algo unilateral sino vilateral, el fin es un nuevo nacimiento, un nuevo nacimiento tal vez sea un fin" Mustang
time is a poor investment
¿Que haces cuando sientes que el amor que esa persona sentía por tí se está acabando?
Y tú aún la sigues amando...
Aprendí el significado de extrañar cuando falleció alguien a quien amé demasiado. No se extraña al que no te contesta los mensajes, al que te rompió el corazón o al amigo que se alejó, se extraña a la persona que no puedes ver nunca más, que nunca más vas a escuchar su voz, que nunca más vas a poder abrazar.
El amor de nuestras mascotas es único ♡
No vayas de chivaton con tus perros llamados amigos, que ese recuerdo quede en tu mente como una forma de saber que esa mujer de verdad te ama y te tiene confianza, vamos amigo, respetala y cuidala, que no sólo te gusta a ti.
Ojalá que pasen años para arrancarme de tu ser...
Ojalá | José Madero
Será macabro pero salvará nuestro amor
So violento, so macabro | Pxndx
Sería lindo...