“El hombre inventó a Dios. Pero no es eso lo extraño, ni tampoco es prodigioso que Dios existiera realmente; lo extraño es que semejante idea haya podido surgir en el cerebro de un animal tan feroz y maligno como el hombre ya que es una idea tan sagrada, tan conmovedora, tan profundamente sabia y que tanto honra al hombre”.
Los Hermanos Karamazov