17 Enero
Como si mirarte fuera pecado, imagínate pensarte, no pasa un día sin que te recuerde profundamente, odié cada rincón de mi pieza por que en cada uno de ellos te imagine y ahora se siente más vacío de lo que se sentía, ya no me falta la respiración ni mi corazón bombea con fuerza, la ansiedad se volvió un querido recuerdo y lo que más me asusta es no encontrar a un perdido que me enseñe a sentir otra vez.